
Aquí va uno de los materiales al que le tengo especial aprecio y cariño: la arena. La arena es un conjunto de rocas desgastadas y reducidas en partículas que generalmente miden pocos milímetros.
En nuestras costas, el componente más común de la arena es el sílice. Dependiendo de la roca de donde procede, la arena puede tener distintas gradaciones de colores: si es oscura, procede de rocas volcánicas. De lo contrario, si es blanca, contiene carbonato de calcio, conchitas y restos de organismos marinos.
La mayoría de los minerales contenidos en son el cuarzo y el feldespato en las arenas blanquecinas y la magnetita, la hematita y el granate en las arenas oscuras. Obviamente, dependiendo de las características, los usos son distintos: como hemos visto en otros posts, se utiliza en la producción de cemento y fue utilizada comúnmente para crear los relojes de arena (lo que me parece fascinante). En los cuadros matéricos puede ser aplicada al natural o añadiéndole pigmento.
En My Tale I Teach, en la entrada cómo usar tierra o arena en un cuadro, se explica como pegar y fijar este material al bastidor de madera o en un lienzo.
Suscríbete a nuestra ARTNewsletter o visita My Tale I Teach en Facebook y, para cualquier duda, deja un comentario o contacta conmigo.
Trackbacks/Pingbacks
[…] primero en que pienso es en el peso que adquiere un cuadro cuando se le añade tierra o arena (es como si colgases un pedrusco, de verdad). Y lo segundo que pienso es en la rigidez que estos […]
Me gustaMe gusta